La selección de Curacao ha emergido como una de las más competitivas del Caribe en los últimos años. Su mayor logro reciente fue ganar la Copa Caribeña 2017, lo que consolidó su posición en la región. Además, ha participado en varias ediciones de la Copa Oro de Concacaf, enfrentando a selecciones con mayor tradición.
Curacao ha logrado combinar jugadores locales con talentos de la diáspora en Europa y América, fortaleciendo el nivel de la selección. Esta estrategia ha permitido mejorar resultados en torneos internacionales y mantener una presencia constante en Concacaf. La selección demuestra que la planificación pueden generar un progreso notable.
El estilo de Curacao se caracteriza por un fútbol rápido y agresivo, con énfasis en contraataques y presión sobre el rival. Los jugadores buscan aprovechar la velocidad por las bandas y generar situaciones de peligro con movilidad constante. La selección prioriza un bloque compacto en defensa y transiciones efectivas hacia el ataque.
Además, los mediocampistas curazoleños cumplen un rol clave en la recuperación del balón y la distribución del juego. Los delanteros buscan espacios y aprovechan errores defensivos, mientras que la defensa mantiene disciplina y coordinación. Esta combinación de velocidad, táctica y cohesión define la identidad futbolística del equipo.
La Federashon Futbol Korsou (FFK) es la encargada del fútbol masculino en Curacao. Fundada en 1921, organiza la selección nacional y supervisa los torneos locales. La FFK ha impulsado programas de desarrollo para jóvenes talentos y mantiene contacto con jugadores curazoleños en ligas internacionales para fortalecer la selección.
La institución también se enfoca en mejorar la infraestructura deportiva y capacitar entrenadores y árbitros. Mantiene coordinación con clubes locales y academias para asegurar un desarrollo sostenido del fútbol. Gracias a estas acciones, Curacao ha logrado consolidarse como un equipo respetado en el Caribe y competitivo en torneos internacionales.